El expresidente de la Federación Espa?ola de Fútbol, Luis Rubiales, inhabilitado tres a?os por la FIFA para cualquier actividad relacionada con el fútbol.

La sanción disciplinaria se debe a un polémico incidente ocurrido tras la victoria de Espa?a en la final del Mundial femenino contra Inglaterra. Durante la entrega del trofeo, Rubiales besó a la delantera Jenni Hermoso, un gesto que suscitó mucha polémica.

Medidas disciplinarias de la FIFA tras el polémico incidente posterior al partido

A pesar de que en un principio se resistió a dimitir, Rubiales renunció a su cargo en septiembre.

El lunes, la FIFA anunció oficialmente la sanción de tres a?os y alegó el artículo 13 de su código disciplinario. Este artículo se refiere a la conducta y el comportamiento apropiados durante los acontecimientos relacionados con el fútbol. Además, hace hincapié en la necesidad de mantener el decoro y el respeto.

La polémica en torno al beso giró en torno a versiones opuestas sobre su naturaleza. Rubiales afirmó que fue una expresión “mutua” y “consentida” de celebración, mientras que Hermoso afirmó que el beso no fue consentido. Por esta razón, se presentó una denuncia judicial.

La FIFA confirmó que el caso se refería específicamente a los “hechos ocurridos durante la final de la Copa Mundial Femenina de la FIFA del 20 de agosto de 2023, por los que el Sr. Rubiales había sido suspendido provisionalmente por un periodo inicial de 90 días”.

Aunque la FIFA ha concedido un plazo de diez días para que Rubiales solicite una decisión motivada, sus opciones incluyen presentar un recurso ante el comité de apelación. El organismo rector mundial destacó su compromiso inquebrantable de respetar y proteger la integridad de todas las personas. Así, se garantiza que se mantengan los principios fundamentales de decencia y respeto en el mundo del fútbol.

Contexto

El mandato de Luis Rubiales como presidente de la Federación Espa?ola de Fútbol estuvo marcado por importantes polémicas y acontecimientos. El incidente del beso en la final del Mundial puso aún más en el punto de mira su liderazgo. Rubiales se enfrentó a una enorme presión para que dimitiera tras el incidente, y la decisión final de dimitir no acalló el debate sobre sus acciones.

La sanción de la FIFA demuestra la importancia de mantener la conducta en el deporte y la importancia de respetar los derechos y los límites de todas las personas implicadas en la comunidad futbolística. Aunque el caso sigue abierto a nuevos procedimientos judiciales, representa un ejemplo convincente de cómo las organizaciones deportivas trabajan para preservar su integridad y defender los principios de respeto y decencia.

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